sábado, 18 de diciembre de 2010
4 comentarios

Eventos para embarazadas coreanas

Cuando Miyoung estaba embarazada asistió a muchas reuniones para futuras mamás. Estos eventos consisten en juntar en un salón de actos a un grupo de mujeres embarazadas (200 ó 300), darles una charla y presentarles los productos de los patrocinadores, que eran siempre supernovedosos y superguays. Yo fui en una ocasión, un domingo, a un evento que ofrecía una sesión de música clásica y jazz, y la verdad es que me lo pasé bien (por la música).

Las reuniones son organizadas por algún tipo de asociación e empresa, y hay que apuntarse en internet. De todas las mujeres que se apuntan algunas son escogidas y otras no. No sé con qué criterio, pero parece que casi no van extranjeras (mientras en los cursillos organizados por el ayuntamiento la mayoría son de Vietnam, China y Filipinas), lo cual da que pensar que los organizadores escogen a las que ven con más posibilidades de gastar dinero. Lógico, porque los eventos son pagados por empresas, que a cambio presentan sus productos directamente a sus futuras clientas.

Estos productos van desde cochecitos a biberones, pasando por ropa y juegos educativos. Se presentan en las charlas y hay un muestrario a la entrada de la sala. Me llamó mucho la atención la abundancia de juegos educativos y libros para aprender inglés y matemáticas. Incluso había representación de academias especiales para bebés.Es decir, que se puede enviar al bebé a aprender inglés casi desde que nace. Aunque la escolarización en Corea comienza oficialmente a los 6 años, está visto que no hay descanso ni para los bebés.

Para que asistan las embarazadas el cebo es una bolsa con regalos y muestras gratuitas (y una botellita de agua, eso siempre). Y conste que el tema es productivo, porque gracias a eso juntamos dos biberones, dos tazitas, tres almohadas especiales para bebés (las del agujero para la cabeza, parecidas a mi donut), muchos trapitos, un babero, un montón de guantes, algún calcetín, un gorro, una decena de pañales, un montón de toallitas húmedas, cuatro pastillas de jabón, complementos vitamínicos, un librito y tres posters educativos, un montón de manuales de embarazos, partos y cuidados del bebé, y una infinidad de muestras de cremitas, champús y geles. Y catálogos como para empapelar la fachada del edificio donde vivimos.
El botín (una parte, que ya usamos muchas cosas).
Por si acaso no es suficiente con los regalitos, también se realizan sorteos. Los productos que se sortean son los mismos que intentan promocionar, claro. Comienzan sorteando cosas baratas, como lotes de geles o de comida para bebés. Después sortean cosas más interesantes: un arnés, una silla para coche... Y al final, el plato fuerte, un cochecito de esos para transportar a los niños. El objetivo de todas las presentes, pero que sólo le toca a una afortunada. Y una vez realizado el sorteo, la sala se vacía en un par de minutos (por eso el sorteo siempre es al final, para que no se escape nadie antes de tiempo).

Hay eventos de estos todos los días, y unos son más populares que otros. ¿Porqué? Pues porque unos dan una bolsa llena de cosas útiles y sortean artículos de gran valor, mientras que otros apenas dan unos catálogos y las gracias por haber asistido. Pensaréis que asistir a un evento bueno o uno malo es cuestión de azar... pues no. Por una parte los eventos organizados por empresas grandes son un valor seguro (por ejemplo los del Hospital de Samsung). Y por otra parte esto de internet tiene múltiples ventajas, y es fácil encontrar blogs de coreanas donde describen cómo son los eventos a los que acuden, describiendo todo al detalle y con fotos de los regalos (ejemplo aquí).

Y antes de terminar vuelvo a lo del cochecito, que tiene su miga, porque en Corea los bebés se transportan con arnés, siempre pegados a la madre. Es más, ni arnés hace falta, porque muchas veces los atan con una tela y ya está; o a pelo, sin tela ni nada. Ahora empiezan a verse cochecitos, pero aún son escasos. No terminan de popularizarse porque son caros y demasiado aparatosos (a ver quién viaja con un cochecito en el metro). Y eso que a los padres les ahorran un montón de dolores de espalda, porque en este país los "bebés" son muy vagos, que he visto alguno que colgando de la madre ya rozaba con los pies en el suelo, y ni con esas caminan solos.
Ese niño ya tiene edad para ir caminando, no?
Y que conste que los he visto aún mayores...
COMPARTIR ES BUENO
Si te ha gustado este post,
puedes ayudarme a mejorar
con un pequeño gesto :)
CLICK AQUÍ
COMENTARIOS DE FACEBOOK
4 comentarios EN BLOGGER
  1. Qué interesante! No sabía que en Corea no eran populares los cochecitos de bebé...
    Pobres madres:(

    ResponderEliminar
  2. ... y pobres padres! Que a nosotros también nos toca cargar con las criaturas. Precisamente este fin de semana me he probado el arnés, que por cierto se compró de MI talla XD
    Ay, lo que me espera...

    ResponderEliminar
  3. jajajajajajajajajajjajajaaaaajajajaja
    Ya sabes a importar un carrito xD

    ResponderEliminar
  4. Pues yo tengo un dicho, es falta de corrección... Acaso no golpean los coreanos a sus hijos también?

    ResponderEliminar